La transformación cultural empieza con la curiosidad.
Por Fran Chuan, Fundador y CEO de Dicere Global.
“Ingeniero fascinado por el potencial latente en las actitudes humanas. Apasionado de la Innovación”.
Es hora de que los mánagers de Recursos Humanos (y seamos sinceros es un nombre horrible) evolucionen de ser “mánagers de personas” a “facilitadores de la curiosidad”. Su objetivo debería ser fomentar la creatividad que todos llevamos dentro.
Sin embargo, para ser capaces de reconocer el talento en las organizaciones y ayudar a los individuos a que expresen su potencial tenemos que ser capaces de medir y diagnosticar. En vez de usar la intuición subjetiva necesitamos datos reales y una imagen completa de sus fortalezas y debilidades de la cultura de empresa antes de empezar el tan importante proceso de transformación.
¿Qué es la “innovación”?
La curiosidad, imaginación y creatividad son los puntos de partida de la innovación. Estimular la curiosidad de tu equipo significa hacerles buscar los problemas y no las soluciones. ¿Qué dificultades tenemos? ¿Qué retos nos esperan? ¿Qué tendencias emergentes nos hemos perdido? La curiosidad es individual, pero las respuestas innovadoras a un problema nacen del equipo. Resolvemos juntos los problemas.
La innovación es la consecuencia de la transformación. Como ingeniero, las empresas me piden constantemente que las ayude en su transformación digital. ¿Mi respuesta? “Olvídate de la transformación digital. Lo importante es la transformación cultural”. El primer problema que observo cuando trato con una empresa es la falta de una definición específica para esa “transformación”, ni siquiera a qué se refieren con “digital”. La digitalización es sólo un medio para lograr un fin, no es un fin en sí mismo. Así que comencemos por preguntarnos qué es o que realmente queremos cambiar, cuál es el objetivo de ese cambio y cómo medimos esa transformación.
La curiosidad, imaginación y creatividad se estimulan mediante preguntas.
¿Qué es lo que frena a las empresas a dar este paso vital? La respuesta se puede resumir en una palabra: miedo. Miedo de no poder medir los resultados. Miedo a lo desconocido. A los mánager se les enseña a tomar decisiones basándose en los resultados de un Excel. Pero la curiosidad, la imaginación y la creatividad no tienen cabida en un Excel. Transformación significa pensar en el futuro, pero no tenemos datos sobre el futuro. Primero tenemos que actuar para generar nuevos datos, analizarlos y actuar de nuevo. Ése es el cambio de paradigma: lo opuesto a cómo estamos habituados a actuar.
El rey ha muerto. Larga vida al equipo.
Las organizaciones con éxito están cambiando de un modelo organizativo “medieval” de arriba abajo a un modelo “renacentista” con un líder en el centro que constantemente lanza preguntas a un círculo creativo para facilitar la reflexión y no un líder que solo da respuestas. Esa es una buena definición de “inteligencia colectiva”. Un modelo que nos lleva desde Lorenzo de Medici a Elon Musk.
Necesitamos herramientas que nos ayuden a compartir las ideas y tendencias que detectamos, a compartir nuestro conocimiento. Herramientas que realmente nos ayuden a identificar el talento de los individuos. No lo que está en su CV sino lo que realmente fomenta su curiosidad. Y aquí es donde una plataforma como TeamEQ nos es de gran utilidad: mostrando el talento individual y colectivo para identificar las fortalezas y la cultura de nuestro lugar de trabajo y así ayudarnos a generar uno nuevo.
¿Cómo podemos salir más fuertes del Covid19?
Toda crisis genera cambio y oportunidad. Las organizaciones necesitan fortalecerse. La actual crisis generará la caída de empresas que ya están en declive. Este es el momento de enfocarse en la esencia de quién eres. Pregúntate “si tuvieras que crear hoy de nuevo tu empresa desde cero ¿con qué te quedarías? ¿de qué te desharías?
Tener a gente imaginativa en tu empresa será clave. Todo cambio genera oportunidad, solo tienes que saber dónde buscarla. Olvida los datos de los que ya dispones porque ahora son inútiles. Observa la situación actual y comienza a generar nuevos datos. ¿Qué ideas podemos ya identificar ahí fuera?
¿A qué esperas?
No esperes. ¿Qué harías si el futuro fuera igual que el presente? Haz ya los cambios que estás planeando ahora. El miedo a la incertidumbre solo se cura logrando la certidumbre. La certidumbre solo se logra mediante datos y para generar datos tienes que actuar.
Mi objetivo con Innoquotient es proporcionar a las empresas una foto de su gente y su cultura y herramientas como TeamEQ son muy útiles para medir su pulso. Nos ayudan a evaluar la curiosidad o, por el contrario, la falta de imaginación en nuestros equipos. Los datos nos ayudan a identificar el talento orgánico y el talento individual. El objetivo es detectar este talento individual y combinarlo en equipos con éxito.
Piensa en grande. Imagina. Sueña.
La única diferencia entre una idea loca y una gran idea es que esta funcionó. Es por ello que necesitas a gente con imaginación en tu equipo, gente que piensa fuera de la caja. La creatividad consiste en encontrar formas de convertir una idea en realidad, testear tu hipótesis a través de ideas o prototipos. Y esa es la razón por la que necesitas a las personas adecuadas en cada fase del proceso. TeamEQ es un gran ejemplo de una plataforma que proporciona datos que aumentan la eficacia y el éxito de pequeños logros.
Mi definición de transformación cultural es la combinación eficiente entre talento e innovación radical y TeamEQ es la herramienta perfecta para identificar ese talento individual y saber cómo combinarlo.
Las empresas son tan buenas o malas como todo su personal combinado. Es hora de poner a la imaginación en el centro de todo lo que hacemos y comenzar a liderar la transformación cultural que nos llevará hacia el futuro.
Realiza hoy una demo y descubre cómo TeamEQ te puede apoyar en la transformación cultural de tu empresa.